No creo en las brujas, pero que las hay, las hay. Apliquemos el mismo adaggio a los fantasmas y luego nos damos una vuelta por la antigua casa de Emilia Attias, en la que un hombre que estaba haciendo una refacciones le tomó una foto al "espíritu" de un chico al que se ve sacando la lengua detrás de una puerta. La actriz y su marido aseguran que nunca vivieron experiencias sobrenaturales en esa vivienda que ocuparon hasta hace cinco años. Y todo parece explicarse por los "poderes" de Darío Heredia.
Lo cierto es que desde hace un par de días, la anécdota del fantasma del nene recorre los programas televisivos, donde han aparecido tantos "especialistas" en la vida del más alla, que ya el conjunto parece una película bizarra. En el programa de Fantino -para dar un ejemplo- llevaron a un cura exorcista que explicó, entre sonrisas de las hermanas Pombo y otros personajes dignos de Almodovar, las diferencias entre una cruz de hierro y una de madera en el rito de expulsión de un demonio.
Volvamos a la foto. No soy especialista en seres de otras dimensiones, pero no alcanzo a ver al "nene levitando en ropa interior detrás de la puerta del ropero", del que habla el sensitivo. Para ser un fantasma, tiene demasiada carne e incluso parece hacer al fotógrafo el típico e internacionalmente famoso gesto con el dedo mayor en alto y el puño cerrado. Si me corren un poco, hasta agregaría que tiene un jean y una camisa a cuadros. Y más que un espíritu parece un pibe que se metió en la casa (que en la foto está con la puerta abierta) mientras el constructor realizaba su trabajo.Conozco gente viva que tiene más pinta de fantasma que ese nene.
Ahora parece que Heredia ha visto otras "entidades" (entre ellas una mujer) y está más cerca de Whoopi Goldberg en "Ghost" que de un constructor común y corriente ¿Estaremos en presencia de un nuevo cazafantasmas?, ¿será un vivillo más de los que abundan en esta tierra? Y el nene, ¿dónde está realmente? Los coreanos ya estarían haciendo una película.
(Publicado en la columna "El click del editor", de La Razón, de Buenos Aires)