La cadena internacional de café Starbucks, fundada en Seattle y presente en más de 55 países, fue denunciada por un hombre que descubrió una cámara espía en uno de los baños de una sucursal de Washington. Según la cadena ABC News, William Yockey contó que su hija de 5 años necesitaba ir al baño y al entrar a los servicios unisex y lavarse las manos descubrió que había una cámara grabando cerca del lavatorio.
El padre, de 28 años, llamó al encargado y este avisó a la policía que al llegar al lugar confirmó que el aparato electrónico estaba operativo. Por el momento no se sabe quién lo dejó y la policía abrió una investigación sobre el caso para esclarecer los hechos. A raíz de esto, el hombre pidió un millón de dólares como indemnización y denunció a Starbucks por no inspeccionar sus instalaciones, fallar en la supervisión de sus empleados y por violación de privacidad. La empresa aduce que llamó inmediatamente a la policía. Esto se va a arreglar con un café por medio.