Alguna vez ya escribimos sobre este sujeto. Se trata del polémico (por no decir demente) investigador puertorriqueño y experto en temas paranormales (para no añadir estupideces) Reinaldo Ríos. Este cavernícola mental tiene muchos adeptos y hay quien lo toma tan en serio que se hacen cadenas con sus "comunicados de prensa", que llegan a todo el planeta. Es un chanta del año cero, que entre otras "virtudes" confiesa haber sido abducido por un plato volador. Un festín para psiquiatras.
En estos días, Ríos anda con mucho trabajo. Y no es para menos, ya que convocó a una caza de vampiros, zombies y brujas en varias regiones de Puerto Rico. Lo más loco es que el demente de marras está contra quienes aseguran que el mundo se acabará el 21 de diciembre próximo, según las profecías mayas. Y como asegura que muchos creen en ese apocalipsis, las fuerzas del mal saldrán a hacer de las suyas sin miramientos. De alli -argumenta- es que hay que estar atentos.
Como ya habrás advertido, este tipo está mal de la cabeza y no tiene retorno. Y convencido de sus bolazos -no menores a los de los apocalípticos- solicitó a la policía portorriqueña que vigile todas las reuniones que se hagan antes, durante y después de Hallowen, que es cuando los vampiros saldrán a chupar sangre, de acuerdo a su endeble psiquis.
Rios le habría dicho a la policía que los grupos satánicos van a sacrificar desde menores hasta personas altamente enfermas, con lo cual él debería preocuparse de sí mismo. Lo peor es que las autoridades policiales comparten algunas de sus teorías, o por lo menos es lo que el sujeto afirma. Hay un dato a considerar. Atendé la lógica de una cabeza enferma. Halloween cae en 31 del mes. Invirtiendo los dígitos es 13. Y agrega Ríos: "Es una fecha clave para la batalla entre el bien y el mal". El "investigador" concluye que "es una lucha contra el mismo Diablo, que según la Biblia está suelto". Que alguien lo medique urgente antes de que se mande una macana.
(Publicado en la columna "El click del editor", de La Razón, de Buenos Aires)