Hoy es el día de San Valentín. Qué día tierno, que jornada para celebrar, que fecha más encantadora para la gente enamorada, que entusiasmo colectivo con tanta prensa que hasta el buscador de Google se vistió para la ocasión. Este día, supongo, se conmemora por los 80 años en que los hombres de Al Capone masacraron a los integrantes de la pandilla rival de los O’Banion, una de las pocas que había puesto en peligro el poder mafioso de Alphonse. El 14 de febrero de 1929, los muchachos del más famoso de los gánster del siglo XX (en el que la mafia tuvo nombres más que célebres) liquidaron a siete de los O’Banion, que se encontraban sentados en un garaje esperando un cargamento de alcohol (era plena época de la Ley Seca). Tres policías y dos hombres de civil llegaron en un auto, desarmaron a los rivales, los pusieron de espaldas y los rociaron no con las bellas flores de un enamorado sino con el contenido de los cargadores de cinco ametralladoras. Desde entonces, en la jerga de la mafia, se conoce esa jornada como "El día de San Valentín". ¡Cómo se querían esos muchachos! ¿Es por eso que hoy festejan los enamorados, no es verdad?
