Después de casi dos milenios, los gladiadores romanos volvieron a combatir en el Coliseo y uno de ellos fue herido por el enemigo, en este caso un policía. Resulta que un grupo de personas que se sacan fotos con los turistas disfrazados de centuriones se pusieron en pie de guerra ante la aprobación de una ordenanza que les impide estar en el Coliseo, la Fontana Di Trevi y otros lugares históricos estratégicos. Lo más lindo es que los turistas se pusieron del lado de los "gladiadores" al grito de "Somos todos centuriones" mientras sacaban fotos. "¡Resistiremos! ¡Un centurión romano nace y muere en el Coliseo!", se sumó uno de los luchadores. Y así estuvieron largo rato. Un verdadero conjunto de estúpidos.
