Por Humberto Acciarressi
Hay que suponer que nadie, por los sesenta, imaginaba que aquel rock criticado por casi todos y seguido por pequeñas sectas de jóvenes, iba a recorrer tan largo y fructífero camino. Ya estamos a medio siglo de aquellos primeros acordes y, como suele ocurrir, mucho de entonces se perdió en el camino y casi no quedan vestigios. Hacer una labor historiográfica, minuciosa y casi sin omisiones, no es fácil. A menos que el encargado sea Litto Nebbia y se haya pasado cinco años de su vida metido en este proyecto. El fruto de ese esfuerzo descomunal es "Una celebración del rock argentino", nueve CDs que contienen más de doscientos temas que abarcan el período de 1963 -fecha de aparición de Los Gatos Salvajes en Rosario- hasta 1973 -cuando irrumpen en el escenario musical Sui Generis y León Gieco-.
Hay dos datos claves que hacen de esta monumental antología una pieza única. El primero, como señala el propio Nebbia, es que no son covers. En rigor, son reinterpretaciones de clásicos y temas no muy conocidos de aquellos tiempos fundacionales. Y cada una de estas versiones es asumida por otros cantantes o grupos, ya sea de aquellas épocas como de los años que siguieron. De algunos temas hay, incluso, dos interpretaciones. Por ejemplo "El rey lloró", de Los Gatos, es cantada en uno de los CD por el Flaco Spinetta y en otro por León Gieco.
Y así tenemos a Fito Páez versionando "Viento dile a la lluvia", Los Super Ratones con "Ana no duerme", Andrés Calamaro haciendo "Laura va", Lalo de los Santos con "Muchacha ojos de papel", el propio Litto Nebbia interpreta "Yo vivo en una ciudad", Daniel Homer con "Barro tal vez", Silvina Garré encara "Sólo se trata de vivir", Guadalupe Raventos hace lo suyo con "Presente", Ulises Butron canta "Pato trabaja en una carnicería", y la lista sigue hasta superar los doscientos. Se trata de una superproducción como se ven pocas en el mercado discográfico, en la que intervinieron unos cien músicos. La obra cuenta con el auspicio de la Secretaría de Cultura de la Nación, al tiempo que un porcentaje de lo que vaya a recaudar se destinará al hospital Garrahan.
Hay que suponer que nadie, por los sesenta, imaginaba que aquel rock criticado por casi todos y seguido por pequeñas sectas de jóvenes, iba a recorrer tan largo y fructífero camino. Ya estamos a medio siglo de aquellos primeros acordes y, como suele ocurrir, mucho de entonces se perdió en el camino y casi no quedan vestigios. Hacer una labor historiográfica, minuciosa y casi sin omisiones, no es fácil. A menos que el encargado sea Litto Nebbia y se haya pasado cinco años de su vida metido en este proyecto. El fruto de ese esfuerzo descomunal es "Una celebración del rock argentino", nueve CDs que contienen más de doscientos temas que abarcan el período de 1963 -fecha de aparición de Los Gatos Salvajes en Rosario- hasta 1973 -cuando irrumpen en el escenario musical Sui Generis y León Gieco-.
Hay dos datos claves que hacen de esta monumental antología una pieza única. El primero, como señala el propio Nebbia, es que no son covers. En rigor, son reinterpretaciones de clásicos y temas no muy conocidos de aquellos tiempos fundacionales. Y cada una de estas versiones es asumida por otros cantantes o grupos, ya sea de aquellas épocas como de los años que siguieron. De algunos temas hay, incluso, dos interpretaciones. Por ejemplo "El rey lloró", de Los Gatos, es cantada en uno de los CD por el Flaco Spinetta y en otro por León Gieco.
Y así tenemos a Fito Páez versionando "Viento dile a la lluvia", Los Super Ratones con "Ana no duerme", Andrés Calamaro haciendo "Laura va", Lalo de los Santos con "Muchacha ojos de papel", el propio Litto Nebbia interpreta "Yo vivo en una ciudad", Daniel Homer con "Barro tal vez", Silvina Garré encara "Sólo se trata de vivir", Guadalupe Raventos hace lo suyo con "Presente", Ulises Butron canta "Pato trabaja en una carnicería", y la lista sigue hasta superar los doscientos. Se trata de una superproducción como se ven pocas en el mercado discográfico, en la que intervinieron unos cien músicos. La obra cuenta con el auspicio de la Secretaría de Cultura de la Nación, al tiempo que un porcentaje de lo que vaya a recaudar se destinará al hospital Garrahan.
Muy a grandes rasgos, los homenajeados de esta década clave en la historia del rock vernáculo son Los Gatos, Almendra, Moris, Miguel Cantilo, Roque Narvaja, Arco Iris, Manal, Vox Dei, Pappo´s Blues, Pescado Rabioso, Aquelarre, Huinca, Color Humano, Sui Generis, León Gieco, Charly García, Luis Alberto Spinetta, Litto Nebbia, Miguel Abuelo, Alma y Vida, El Reloj, La Cofradía de la Flor Solar, etc. Si a esto le sumamos los que realizan los homenajes, tenemos un trabajo imprescindible en las repisas de todo amante del rock argentino.
Desde hace muchos años, Litto Nebbia nos tiene acostumbrados a hacer realidad lo que parece casi imposible. En este caso, como un bonus casi tan importante como el resto, además de la recopilación, se trata de alguien que vivió aquella movida desde bien adentro. Más no puede pedirse.
(Publicado en el suplemento de música Te Suena, de La Razón de Buenos Aires)