27 mayo 2009

La historieta del mundo en Buenos Aires


Hasta el domingo próximo, el vasto, multivariado, rizomático, inabarcable, maravilloso y sugestivo universo de los cuadritos, sean multicolores o monocromáticos, sigue latiendo en los tres escenarios en los que se desarrolla en Buenos Aires el encuentro denominado "Viñetas sueltas". Se trata de la segunda edición del Festival Internacional de Historietas, que se realiza en tres escenarios: el Centro Cultural Recoleta, la Alianza Francesa y el Malba (Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires).


Años y años le demandó a la historieta en todas sus variantes conseguir un sitio de privilegio en el mundo del arte con mayúsculas. Incluso ya en pleno imperio del tiempo de la imagen, el género era despreciado por las elites y los académicos, que la consideraban un mero entretenimiento de las clases populares. Todavía no habían llegado las reivindicaciones teóricas de un Umberto Eco y creadores como Oesterheld y Breccia eran mirados de soslayo por el establishment del arte.

Pero esas épocas ya pasaron, las historias en cuadritos -a los empujones, a fuerza de calidad -se pusieron en la mira de los estudiosos, que comenzaron a encontrarle virtudes que el pueblo ya conocía desde siempre. Ahora, Buenos Aires se ha convertido desde el pasado lunes en un escenario más que privilegiado. En esta oportunidad, el eje es el abordaje de la historieta desde distintos ángulos. Y hay -en esto nuestra ciudad tiene historia- múltiples actividades, muestras de autores nacionales (una con cien originales de quienes colaboraron con Carlos Trillo) y de historietistas de varias ciudades del mundo.


Entre los creadores extranjeros se cuentan Etienne Davodeau (Francia), Ibn Al Rabin y Alex Baladi (Suiza), Andrea Bruno y Paolo Parisi (Italia), Xavier Löwenthal (Bélgica), Mauro Entrialgo (España), Leif Tande (Canadá), Fabio Zimbres y André Kitagawa (Brasil), John Joven y Trucha Frita (Colombia), Rodolfo Santullo, Matías Bergara e Ignacio Calero (Uruguay), Frank Arbelo (Bolivia). Con estas y muchas otras firmas, además de películas, talleres, intervenciones públicas, clínicas de guión, y todo lo que se te ocurra que tenga que ver con las historietas, los amantes del género están viviendo una semana de lujo que, en lo que hace a las grandes actividades, recién empieza.





El Uniberto agradece a los amigos organizadores el permiso para la reproducción de las viñetas que ilustran esta entrada.