25 septiembre 2015

Amor sin barreras

Una hermosa ridícula de antaño

Gato fotógrafo

La doble tragedia de la sensual Jayne Mansfield


Por Humberto Acciarressi

Las nuevas generaciones no saben quién es, salvo que la persona en cuestiòn sea un amante del cine (y hay que reconocer que son muchos los jóvenes entusiastas). Pero mirando documentales y leyendo libros y diarios de la época, uno advierte que Jayne Mansfield fue uno de los íconos sexuales del cine de Hollywood de las décadas del 50 y del 60 del siglo XX. Teñida con un rubio platinado que parecía natural, un rostro bonito y unas medidas escandalosas para la época (102-56-90 y al respecto se conoce una foto en la que Sofía Loren le mira de soslayo los pechos con cara de sorprendida), a la luz de la hechos tuvo la desgracia de haber sido contemporánea de Marilyn Monroe. Y competir con la rubia más bella de la historia del cine no era poca cosa. Como actriz, la Mansfield comenzó con películas de la 20th Century Fox, sin la suerte de tener los guionistas o directores de la colega a cuya sombra estaba, a pesar de ser archifamosa.

Jayne, además, tuvo papeles destacados e intervenciones en célebres en programas televisivos, entre ellos el "The Ed Sullivan Show", el mismo que lanzó a la fama a los Beatles en la primera gira del cuarteto por los Estados Unidos. Ya entrada la década del sesenta, y muerta Marilyn Monroe en la noche del 4 al 5 de agosto de 1962, los estudios comenzaron a retacear el papel de las rubias. Toda comparación posible con ella era poco comercial. Mansfield conservó su fama, pero la aprovechó en películas clase B y presentaciones en clubes nocturnos. En 1963, además, se convirtió en la primera actriz famosa de Hollywood en hacer un desnudo en el film "Promises, Promises", dirigido por King Donovan, que nadie recordaría si no fuera por esa anécdota. Curiosamente -o no tanto- Jayne Mansfield, además de sus tres matrimonios, fue amante de John y Robert Kennedy. Igual que la Monroe. Del presidente de los Estados Unidos lo fue hasta el momento en que éste fue asesinado en Dallas. E incluso la actriz reveló que "a John le encantaba la posición del misionero y tuve que enseñarle algunos trucos para que me diera placer".

Es justo aclarar que la actriz que era calificada como "la copia vulgar de Marilyn", también cantaba, era poeta, tocaba instrumentos (virtuosamente el violín), recitaba a Shakespeare de memoria, hablaba perfectamente cinco idiomas y -agarrate- tenía un coeficiente intelectual superior al de Stephen Hawking. Cuando comenzaba el 29 de junio de 1967, Jayne volvía de bailar en un show en Biloxi, Mississippi, y se dirigía a Nueva Orleans en medio de la oscuridad. El auto lo manejaba su chofer, y en el asiento delantero también iban ella y su amante Sam Brody. En una curva de la ruta, el coche se estrelló contra un camión estacionado, lo que causó la muerte de las tres personas de adelante, en el caso de Mansfield decapitada. Ese fue el fin de aquella a quien apodaban "los pechos de Norteamérica". Concluyo con otra anécdota. En el automóvil del siniestro también viajaban, en el asiento de atrás, tres de los cinco hijos de Mansfield. Salieron ilesos, sin magulladuras. Una de ellos era Mariska Hargitay, que entonces tenía tres años y a quien vos conocés por su personaje de la detective Olivia Benson de la serie "La Ley y el Orden".

(Publicado en el diario La Razón, de Buenos Aires)

Estado en el que quedó el
auto de Jayne Mansfield
Mariska Hargitay, hija de Jane Mansfield,
cuando tenía 3 años de edad viajaba
en el auto en el que se mató su madre.
Es la detective Olivia Benson en La ley y el orden.
Sophia Loren mira los pechos de
Jayne Mansfield, en una foto célebre

River, sin vueltas, el campeón del siglo XX argentino


Y DENTRO DE 85 AÑOS 
VOLVEMOS A HABLAR

24 septiembre 2015

Jaime Maussan, el mexicano más bizarro de la galaxia


Por Humberto Acciarressi
En Twitter (hoy X) @uniberto

Twitter, ya lo escribí varias veces, es una magnífica herramienta para la comunicación global. Pero para los amantes de lo bizarro y de los personajes insólitos, es el extremo del Arco Iris en donde se encuentra la vasija de oro. Es, para decirlo sin vueltas, una cantera inagotable de frases, sucesos y dislates que hacen reir a un muerto. Una amiga mexicana, Elizabeth Legarreta, que despliega su simpatía en la red social del pajarito, retuiteó hace unas horas un meme con la cara de un hombre con la siguiente frase: "Se acabó el mundo. Pero inmediatamente después empezó otro exactamente igual. Por eso no se notó". Incluso el rostro del tipo hacía juego con esa cargada, con una cita que no le pertenece aunque se encuentra a tono con sus actividades. Palabras van, palabras vienen, Elizabeth me contó que se trataba de Jaime Maussan, un "investigador" del tema Ovni y de cuanto episodio insólito se le cruce por el camino.

Para ilustrar lo gracioso del asunto, esta mexicana de gran sentido del humor -el más noble de los sentidos-, me envió el link a un video de You Tube en el que Maussan se dedica a analizar junto a otro sujeto, los quehaceres de un "pingüino" parado como una estatua sobre la punta de un pino. Durante varios minutos, y luego de aclarar que estos bichos no vuelan y su hábitat está en el extremo sur de la Argentina, este chanta de envergadura concluye que los expertos en fauna van a tener que explicar "qué hace un pingüino subido a un pino en el centro de la república mexicana". Ya fuera de la red social, la twittera amiga me dijo que en sus pagos es ultrafamoso y que ella no conoce a nadie que lo tome en serio. Y me invitó a recorrer sus videos, donde realiza lo que Elizabeth denominó con total contundencia como "puro humor involuntario". Decir que me estuve riendo varias horas no es exagerado. Los videos y los reportajes a Maussan, escandalosamente bizarros, son adictivos.

Tengo el deber intelectual de consignar que, además, este "investigador" cuenta en una entrevista que él mismo estuvo en contacto con seres extraterrestres. Buscalo y miralo. Nada de lo que yo pueda decir se acerca a las burradas que se escuchan en esa nota. Una de las cuestiones a destacar es que este Maussan ha protagonizado papelones siderales, de los que se han burlado tirios y troyanos, con fotos y videos más trucados que en una película de Ed Wood. Ennumerarlos resultaría agotador. Este vivillo -nobleza obliga- ha estado en programas de todo tipo, incluso de grandes cadenas. Y en la wikipedia se afirma que ha ganado un número de premios casi tan abrumador como sus bizarros asuntos. Algunos de esos galardones, por ejemplo, con el nombre de George Adamski, aquel cèlebre caradura que tenía "charlas con extraterrestres" . Lo último que sabemos de Maussan es que dice que hay vida en Marte, lo cual ni siquiera es una novedad. Y que en la televisión argentina, vía Skype, lo entrevistó Chiche Gelblung. En fin. Todo esto confirma una teoría personal: los mejores humoristas son los que hacen cosas aparentemente serias.

(Publicado en el diario La Razón, de Buenos Aires)

"La dama de Shanghái" en japonés