Ya desde chico, Ambroise Paré (1510-1592) se sintió atraído por las cuestiones médicas y a los 26 años era el Compagnon Chirugien en el Hotel Dieu de París, un importante hospital de esa época de elevada mortandad, lo que le permitió ser cirujano militar de las tropas francesas en las campañas de Italia. Mientras descubría formas de curar (por ejemplo la ligadura de arterias, las técnicas de extracción de proyectiles o la construcción de prótesis de miembros amputados), Paré se dedicaba a escribir libros. A quien fue, entre otras cosas, cirujano real de Enrique II, Francisco II, Carlos IX y Enrique III, hoy se lo reconoce como pionero de la cirugía moderna y "padre de la cirugía francesa".
Sin embargo, en esta oportunidad, nos interesa su obra "De monstruos y prodigios", que en su momento le valió el repudio de la Escuela de Medicina de París y una querella por supuesto atentado contra las buenas costumbres. A Paré no le importó demasiado y se convirtió en un verdadero coleccionista de "monstruos" humanos, incluyendo aportes anteriores a su época. Acá publicamos algunas de esos prodigios, ya que el cirujano francés nos legó una cantidad notable de ilustraciones, pues estaba convencido de que el monstruo era un objeto esencialmente visual y resulta inconcebible sin imagen.
