"... Parecían salidas de la pluma temblorosa de un dibujante de historietas muy alcoholizado... Las criaturas nos miraban y nosotros las mirábamos, y finalmente una se acercó hasta que no estuvo a más de dos metros. Se paró allí, mirándonos intensamente. Y luego cayó muerta a nuestros pies..."
Clifford D. Simak
(fragmento de "Los caiganse muertos")