En este sentido, ciertas especies que estaban en alerta amarillo antes de los incendios están ahora a punto de desaparecer, como la rana corrobora del sur y la zarigüeya pigmea de la montaña, que habitan en el Parque Nacional Alpino de Victoria y el Parque Nacional Kosciuszko de Nueva Gales del Sur, regiones arrasadas por el fuego. También están al borde de la desaparición la cacatúa negra brillante, el quoll de cola manchada y el potoroo de patas largas (estos dos últimos son pequeños marsupiales).
Janine Green, voluntaria en WIRES Wildlife Rescue, le dijo a la CNN que será extremadamente difícil para las poblaciones de animales recuperarse después de los incendios. "No tienen alimento, no tienen agua, no tienen hábitat ¿Cómo se van a reproducir después de este desastre?", apuntó la especialista.