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28 febrero 2009
Chiche el linyera, nuevo ídolo de Facebook
Por Humberto Acciarressi
No debe tener ni la más remota idea de quien fue Andy Warhol, y mucho menos de aquella frase sobre los quince minutos de fama. Tampoco debe haber pensado jamás que iba a salir en los diarios y que, de golpe, tendría como cinco mil fans de su andrajosa figura. Ni siquiera debe saber lo que es Facebook, donde su facha de Rubén Rada está acompañada de una frase en "Intereses personales": "Simplemente sobrevivir". Chiche el ciruja, uno de los tantos homeless argentos, vive en Rosario y a veces para en el Boulevard Oroño, aunque también se lo ha visto en las cercanías de la Facultad de Humanidades o en la Plaza San Martín.
De acuerdo a lo que se cuenta, unos chicos le abrieron la cuenta y, en poco tiempo, Chiche ya tenía 3.500 seguidores. Mirando la foto, uno advierte que su comercio con el agua es tan distante como lo es la Tierra de Ganímedes. Ya estoy planificando un viaje a Rosario para entrevistarlo. Tengo mis motivos que paso a explicar. Hace más de un lustro, un homeless norteamericano llamado Kevin Barbieux abrió un blog para contar su vida. Era tan croto como Chiche. Alguien le donó una notebook y actualiza desde sitios con Wifi gratuito. Hace poco reflexionaba: "Creé el blog en 2002 y se volvió muy popular casi al instante. Fue por haber estado en el tiempo y en el sitio correcto".
Estuve viendo algunas de sus cuentas y mirando su perfil. Les aseguro que tiene más guita que todos nosotros juntos. Además lee a Steinbeck, entre sus películas favoritas figura "Rashomon" de Kurosawa, ama el jazz. etc. ¿Se dan cuenta por qué quiero entrevistar a Chiche lo más rápido posible? Porque después voy a tener que pedirle un turno a su secretaria.
No debe tener ni la más remota idea de quien fue Andy Warhol, y mucho menos de aquella frase sobre los quince minutos de fama. Tampoco debe haber pensado jamás que iba a salir en los diarios y que, de golpe, tendría como cinco mil fans de su andrajosa figura. Ni siquiera debe saber lo que es Facebook, donde su facha de Rubén Rada está acompañada de una frase en "Intereses personales": "Simplemente sobrevivir". Chiche el ciruja, uno de los tantos homeless argentos, vive en Rosario y a veces para en el Boulevard Oroño, aunque también se lo ha visto en las cercanías de la Facultad de Humanidades o en la Plaza San Martín.
De acuerdo a lo que se cuenta, unos chicos le abrieron la cuenta y, en poco tiempo, Chiche ya tenía 3.500 seguidores. Mirando la foto, uno advierte que su comercio con el agua es tan distante como lo es la Tierra de Ganímedes. Ya estoy planificando un viaje a Rosario para entrevistarlo. Tengo mis motivos que paso a explicar. Hace más de un lustro, un homeless norteamericano llamado Kevin Barbieux abrió un blog para contar su vida. Era tan croto como Chiche. Alguien le donó una notebook y actualiza desde sitios con Wifi gratuito. Hace poco reflexionaba: "Creé el blog en 2002 y se volvió muy popular casi al instante. Fue por haber estado en el tiempo y en el sitio correcto".
Estuve viendo algunas de sus cuentas y mirando su perfil. Les aseguro que tiene más guita que todos nosotros juntos. Además lee a Steinbeck, entre sus películas favoritas figura "Rashomon" de Kurosawa, ama el jazz. etc. ¿Se dan cuenta por qué quiero entrevistar a Chiche lo más rápido posible? Porque después voy a tener que pedirle un turno a su secretaria.
27 febrero 2009
Pobre folículo piloso...se pone blanco
Por Humberto Acciarressi
La historia es una suma de casualidades que no excluyen las causalidades. La sabia sentencia "Si mi abuelo hubiera amamantado a mi padre sería mi abuela", no es arbitraria, ni siquiera con la ligera modificación que acabamos de introducir en el adagio.
Tampoco es cierto que Hollywood esté estudiando una película en la que un chico nace totalmente canoso y muere 80 años más tarde con el pelo negro como Louis Armstrong. Nada de eso. La ciencia acaba de deshacer un mito: el que sostiene que el pelo blanco es causado por los disgustos o por el miedo, e indirectamente le puso término a la leyenda de las canas verdes, salvo que el sujeto afectado se llame Hulk.
Sabíamos que el pelo tiene color gracias a la melamina. Ahora nadie podrá ignorar que el tiempo destruye la enzima MSR que aniquila el peróxido de hidrógeno, que se acumula cuando desaparece su archienemigo. Varios capítulos más adelante se bloquea la producción de tirosinasa, que ayuda en la producción de melanina.La historia culmina con el pelo blanco, que siempre es mejor que el gris intermedio.
Si usted es blanco o tiene rasgos orientales, las canas le llegarán antes. Si es negro tendrá unos años de gracia. Si es pelado no se notarán los cambios. Si le sirve de consuelo, más de la mitad de la población mundial por arriba de 45 años, tiene el cabello canoso. Si no le sirve de consuelo, tíñase el pelo. Y si tiene dignidad, siga su vida aceptando lo que le tocó en suerte, que más se perdió en la guerra.
(Publicado en "La columna del editor" de La Razón, de Buenos Aires)
El correcaminos, un verdadero turro
No deben ser muchos quienes no odien con entusiasmo al Correcaminos. Sospecho que, como yo, millones de espectadores sueñan con el día cuando el Coyote logre capturar a este pajarraco insoportable y lo pase a mejor vida en una parrilla bien encendida. Si en el universo de los comics existiera un poco de justicia, una última cena debería ser el final feliz esperado por millones de personas. Y por cierto, de esa forma también nos libraríamos - junto al Coyote - del intolerable y burlón bip-bip de ser tan despreciable.
25 febrero 2009
Los Beatles son como el Cid Campeador
La historia (que se apoderó de la leyenda hace rato) dice que el Cid Campeador ganaba batallas después de muerto. La fe poética todo lo puede y está bien que sea así. Pero en aquellos lejanos siglos no había You Tube ni compañías al acecho de las perlitas de esas que se encuentran en cofres bien guardados durante mucho tiempo.
Y el Cid, mejor dicho The Beatles, vuelven de la muerte de dos de sus miembros (John y George) con un tema versionado de "Revolución", subido en estos días a You Tube. Hasta el momento se conocían tres versiones de la canción de Lennon-McCartney. La primera, bien metalera, grabada antes de 1968, fecha en que apareció "The Beatles". Después la editada en el mismo disco, conocido como el Album Blanco. Esta, más acústica y pausada, podemos denominarla como "la clásica". Y alli mismo el experimento psicodélico que en el futuro puede llegar a inspirar films al estilo "El código Da Vinci": la inclasificable Revolución 9, con el monótono "number nine, number nine..." reiterándose eternamente.
Ahora dicen que entre la dos y la tres (algo que no figuraba en ninguna biografía, discografía u otra "fía" de la banda), estaría este tema experimental de diez minutos, que comienza con los Fab Four hablando (muy frecuente en temas beatles de esa época) y culmina con una charla entre John y Yoko. Antes que nada, hay que verificar si la grabación es real. De serlo, bienvenida sea, como los manuscritos inéditos de Borges, o como las batallas que sigue ganando el Cid después de muerto.
(Publicado en "La columna del editor" de La Razón, de Buenos Aires)
El tema de Los Beatles que se encontraba en You Tube, fue levantado por violar los derechos de propiedad del sello EMI, según se informa hoy. Igual, eso no modifica la existencia del mismo, que hasta ayer podía escucharse.
23 febrero 2009
20 febrero 2009
Este Benjamín no nació viejo, sino famoso
Por Humberto Acciarressi
Ayer, anticipadamente, nació Benjamín. No Button, que en unos días estará compitiendo por los Oscars de Hollywood, sino Agüero (por su papá el "Kun"), aunque todo el mundo esté hablando del nieto de Maradona (por su mamá, Giannina). El nene, al nacer con ocho días de anticipación, pasó a ser de Acuario cuando estaba destinado a ser de Piscis. Y aunque todos arriesguen que será futbolista, a lo mejor termina siendo torero, ya que los españoles lo reivindican como suyo por lugar de nacimiento. Y en ese caso, no podrá ser un toreador cualquiera, sino un matador con todas las letras y con el "10" en la capa.
Hasta ahora, sin embargo, el único que movió una pieza, aunque sea en sorna, fue el presidente del Atlético Madrid, que antes del nacimiento de la criatura había anunciado que lo inscribiría como futuro jugador. La imposibilidad de firmar contrato con un feto puede haber arruinado esa operación a futuro. Dalma, la madrina de Benji, podrá enseñarle a eludir controles de alcoholemia, mientras el nene se muera de calor en set publicitarios que ya están siendo negociados.Y bajo la mirada atenta del abuelo y toda la parentela, que temblarán cada vez que siga de largo de una pelota con la mirada puesta en cualquier otro juguete.
Benjamín Agüero Maradona no es Benjamin Button, pero ambos nacieron distintos. Cuál de los dos lleva la peor parte, si el que nació viejo o el que nació famoso, es algo que sólo el tiempo podrá determinar con exactitud.
(Publicado en "La columna del editor" de La Razón, de Buenos Aires)
19 febrero 2009
Los que cuentan su vida...a cualquier edad
Por Humberto Acciarressi
Algunas veces me he quejado de quienes, cuando uno no está de humor, le endilgan largas parrafadas sobre el mundo y sus cuestiones. Con esto quiero señalar que, cuando la oportunidad lo amerita, no está mal emplear un tono paródico para determinados asuntos. Suelo hacerlo en muchas ocasiones. Otra de las cosas que hago mucho es recorrer los blogs que están enlazados con éste, sobre todo porque por algo tenemos links recíprocos. Si querés, llamalo "afinidades".
En esos paseos blogueriles (los hay de todo tipo, como buen paseo que se precie) encuentro verdaderas perlitas. La que encontré ahora es una joyita azteca que parte de un sofisma: que la gente mayor, de la nada, te cuenta su vida completa. En realidad, la gente de cualquier edad, y muy especialmente los jóvenes, te cuentan su vida. Y naturalmente nunca completa. Precisamente, la versatilidad de alguien que escribe (y que para hacerlo debe ser un excelente espectador de la naturaleza humana, que se revela generalmente en gestos y palabras), radica en meterse en los intersticios de esas largas charlas con desconocidos, como oportunamente lo hicieron desde Balzac hasta Hemingway, desde Dickens hasta Auster, desde Borges hasta Le Clezio, desde Joyce hasta Puig. Y entre lo que esos sujetos parlanchines dicen y lo que no dicen, quienes tienen el don y el arte sacan los personajes para las mejores historias de ficción.
En el blog "La isla a mediodía", enlazado con éste, mi amiga Lilián (alguna vez escribió algo sobre Twitter en esta bitácora y por supuesto me gustaría que volviera a hacerlo con otro tema) dice, y cito de memoria, que le parece increible que la gente pueda irse por la tangente en forma indefinida. Ella, que escribe, encuentra mal algo que debería agradecer. Esos personajes potenciales no suelen, como Lilián sostiene, hablar con cualquiera. Y mucho menos si le ven cara de "tarada/o" (creo que es el término que emplea). Me he pasado la vida escuchando historias alucinantes de gente bien común como el portero al que se refiere mi amiga mexicana y lo único que lamento es no tener el talento de un Roberto Arlt o un David Foster Wallace para plasmar dignamente esas historias cotidianas reivindicadas por García Márquez en su discurso de recepción del Nobel.
La propia Ellen DeGeneres, que Lilián menciona, ha dicho en más de una oportunidad que muchos de sus monólogos están inspirados en gente que se cruza por la calle. Y sería imposible de otro modo. Hay algo, sin embargo, que nunca debe hacer un narrador de historias: ponerse por encima de sus personajes, mirarlos desde arriba, ser condescendientes con ellos. Ni siquiera el Marqués de Sade (otro gran observador y atento escucha de historias ajenas) lo hizo. Y eso es mucho decir. La burla por la burla misma, para colmo basada en generalizaciones o lugares comunes, puede generar escándalos, peleas o malos entendidos. Nunca buena literatura ni buen periodismo (especialmente ahora, que las historias de vida están venidas a menos en la profesión).
Ahora bien, lo que señalo muy brevemente aqui, está vinculado a que la amiga Lilián escribe, y lo hace con mucha calidad. Siempre leo sus páginas blogueras, incluyendo las que ella llama "serias" como si estas no lo fueran. Hace poco, charlando con el amigo Santiago Roncagliolo de paso por Buenos Aires, coincidíamos en la necesidad de hablar mucho con la gente de la calle para refrescar el periodismo. Juan Cruz Ruiz, recientemente, también coincidía con esta apreciación en una larga charla que mantuvimos sobre nuestra profesión en la actualidad. No aspiro, dado que no me creo ni de lejos alguien con quien se pueda coincidir cotidianamente, que Lilián esté de acuerdo con lo que escribo muy a las apuradas y sin argumentar demasiado. Lo dije arriba: había encontrado una perlita. Y con eso quise señalar que me había hecho reflexionar. En los tiempos que corren no es poco y por eso le doy las gracias. Podría añadir algo sobre los comentarios de esa entrada, pero como decía Luca Prodan: "Mejor no hablar de ciertas cosas".
Algunas veces me he quejado de quienes, cuando uno no está de humor, le endilgan largas parrafadas sobre el mundo y sus cuestiones. Con esto quiero señalar que, cuando la oportunidad lo amerita, no está mal emplear un tono paródico para determinados asuntos. Suelo hacerlo en muchas ocasiones. Otra de las cosas que hago mucho es recorrer los blogs que están enlazados con éste, sobre todo porque por algo tenemos links recíprocos. Si querés, llamalo "afinidades".
En esos paseos blogueriles (los hay de todo tipo, como buen paseo que se precie) encuentro verdaderas perlitas. La que encontré ahora es una joyita azteca que parte de un sofisma: que la gente mayor, de la nada, te cuenta su vida completa. En realidad, la gente de cualquier edad, y muy especialmente los jóvenes, te cuentan su vida. Y naturalmente nunca completa. Precisamente, la versatilidad de alguien que escribe (y que para hacerlo debe ser un excelente espectador de la naturaleza humana, que se revela generalmente en gestos y palabras), radica en meterse en los intersticios de esas largas charlas con desconocidos, como oportunamente lo hicieron desde Balzac hasta Hemingway, desde Dickens hasta Auster, desde Borges hasta Le Clezio, desde Joyce hasta Puig. Y entre lo que esos sujetos parlanchines dicen y lo que no dicen, quienes tienen el don y el arte sacan los personajes para las mejores historias de ficción.
En el blog "La isla a mediodía", enlazado con éste, mi amiga Lilián (alguna vez escribió algo sobre Twitter en esta bitácora y por supuesto me gustaría que volviera a hacerlo con otro tema) dice, y cito de memoria, que le parece increible que la gente pueda irse por la tangente en forma indefinida. Ella, que escribe, encuentra mal algo que debería agradecer. Esos personajes potenciales no suelen, como Lilián sostiene, hablar con cualquiera. Y mucho menos si le ven cara de "tarada/o" (creo que es el término que emplea). Me he pasado la vida escuchando historias alucinantes de gente bien común como el portero al que se refiere mi amiga mexicana y lo único que lamento es no tener el talento de un Roberto Arlt o un David Foster Wallace para plasmar dignamente esas historias cotidianas reivindicadas por García Márquez en su discurso de recepción del Nobel.
La propia Ellen DeGeneres, que Lilián menciona, ha dicho en más de una oportunidad que muchos de sus monólogos están inspirados en gente que se cruza por la calle. Y sería imposible de otro modo. Hay algo, sin embargo, que nunca debe hacer un narrador de historias: ponerse por encima de sus personajes, mirarlos desde arriba, ser condescendientes con ellos. Ni siquiera el Marqués de Sade (otro gran observador y atento escucha de historias ajenas) lo hizo. Y eso es mucho decir. La burla por la burla misma, para colmo basada en generalizaciones o lugares comunes, puede generar escándalos, peleas o malos entendidos. Nunca buena literatura ni buen periodismo (especialmente ahora, que las historias de vida están venidas a menos en la profesión).
Ahora bien, lo que señalo muy brevemente aqui, está vinculado a que la amiga Lilián escribe, y lo hace con mucha calidad. Siempre leo sus páginas blogueras, incluyendo las que ella llama "serias" como si estas no lo fueran. Hace poco, charlando con el amigo Santiago Roncagliolo de paso por Buenos Aires, coincidíamos en la necesidad de hablar mucho con la gente de la calle para refrescar el periodismo. Juan Cruz Ruiz, recientemente, también coincidía con esta apreciación en una larga charla que mantuvimos sobre nuestra profesión en la actualidad. No aspiro, dado que no me creo ni de lejos alguien con quien se pueda coincidir cotidianamente, que Lilián esté de acuerdo con lo que escribo muy a las apuradas y sin argumentar demasiado. Lo dije arriba: había encontrado una perlita. Y con eso quise señalar que me había hecho reflexionar. En los tiempos que corren no es poco y por eso le doy las gracias. Podría añadir algo sobre los comentarios de esa entrada, pero como decía Luca Prodan: "Mejor no hablar de ciertas cosas".
Ese objeto inanimado
Por Humberto Acciarressi
Universidad de Princeton, equipos de resonancia magnética, neurólogos con demasiado tiempo libre, 21 estudiantes varones heterosexuales y un experimento que se las trae con una conclusión: los hombres perciben a las mujeres en bikinis como a "objetos inanimados". Y una de las investigadoras que dice que se puede aplicar a todas las culturas donde esta prenda sea de uso habitual.
Un dato a tener en cuenta: los muchachos estudiados observaron 160 fotos, ninguna de ellas pornográfica o erótica. Y luego llegaron las explicaciones neurológicas, con conceptos como "córtex frontal", "interpretación mecánica de una imagen". Y después -siempre hay un después- la moraleja de la fábula: un jefe puede beneficiar a empleadas en detrimento de otras, según el modo en que éste idealice el cuerpo femenino.
En primer término, los 21 voluntarios miraron fotos, es decir imágenes inanimadas. No chicas en bikini de cuerpo presente. Ni siquiera un film XXX, una condicionada o un video de Nina Pelosso en el caño. Fotos, simplemente fotos. Y se excitaron como adolescentes con la central de Playboy o los dibujos de Robert Crumb. Pero, ¿qué es un objeto inanimado? Una piedra, un árbol, un teléfono, un vaso, un almanaque, un perro de cerámica, una muñeca de plástico, o cualquier cosa comprada en un sex shop. Lo asombroso del experimento hubiera sido que los voluntarios consideraran como sujetos animados a objetos inanimados, que es lo que realmente vieron ¿O no?
(Publicado en "La columna del editor" de La Razón, de Buenos Aires)
18 febrero 2009
Facebook va y viene
No hay nada más viejo que una noticia periodística. Ayer, en "La columna del editor" de La Razón, escribí las líneas que podés leer más abajo. Hace un par de horas, tras la polémica que desató la modificación de los términos de uso de Facebook, sus creadores decidieron dar marcha atrás con los cambios. Lo que hay que destacar, en todo caso, es la rapidez con la que los usuarios de la red social (yo no lo soy) pusieron el grito en el cielo y empujaron a Zuckerberg y compañía a dejar todo en carpeta. La columna del diario decía lo siguiente.
¿DE QUIEN ES ESA BOQUITA?...ESTE...DE FACEBOOK
Por Humberto Acciarressi
Cibernautas de esos a los que no se les escapa una liebre, acaban de descubrir que la red social Facebook introdujo en la letra chica algo que vendría ser como una violación a metros del Obelisco y a plena luz del día. Una medida que reúne la desvergüenza de la red social con la comisión (por lo menos en países civilizados) de un delito posible. Para no cansar con cuestiones técnicas, digamos que todo el “contenido creado por el usuario”, pasa a estar licenciado por Facebook para cualquier uso que quiera darle, a perpetuidad y sin posibilidad de revocación. El sueño de todo malandra hecho realidad.
La red social cuenta con unos 70 millones de abonados y en tendencia alcista. Si un habitué cansado del onanismo resuelve cerrar su comercio cotidiano con los usuarios de FB, la red podrá hacer lo que quiera con lo que haya subido oportunamente. Y eso incluye datos personales, fotos, obras literarias, etc, etc. Ni Mark Zuckerberg, su creador, debe haberse imaginado hace un tiempo haciendo esto.
Una historia posible: alguien escribe una novela y la sube en Facebook para buscar mayor rebote. La obra se convierte en un best-seller a la altura de Harry Potter, el autor firma un contrato con la mayor empresa editorial, y cuando cree que ya está en condiciones de comprarse una isla y disfrutar de la dolce vita, descubre que FB interpuso un recurso y será quien cobre los derechos. De Ripley.
Otra historia posible: una fiesta termina con todos borrachos en el piso, entre ellos un reacio a estar en la red. Un amigo jodón lo sube a Facebook el día antes de dar de baja la cuenta. La red encuentra esa foto, donde el pobre tipo estaba listo para entrar en el Guiness con un control de alcolhemia, y la vende para una campaña publicitaria mundial. El tipo, ya sobrio, se suicida. El director podría ser David Lynch; el protagonista, vos.
17 febrero 2009
14 febrero 2009
La Masacre de San Valentín
12 febrero 2009
Cortázar en la palabra de los grandes
Nuestra revista digital sigue con los homenajes a Julio Cortázar a 25 años de su muerte. Esta vez lo hace en las voces de algunos, sólo algunos, de los mejores escritores del último medio siglo. Te dejamos con ellos para que disfrutes de lo que dijeron del Cronopio mayor de las letras argentinas.
Dijo Gabriel García Márquez:
"Los ídolos infunden respeto, admiración, cariño, y por supuesto grandes envidias. Cortázar inspiraba todos esos sentimientos como muy pocos escritores, pero inspiraba además otro menos frecuente: la devoción. Fue, tal vez sin proponérselo, el argentino que se hizo querer de todo el mundo"
Dijo Volodia Teitelboim:
"Su muerte personal fue estrictamente cortazariana, casi sin ruido, en un fin que apretó todos los nudos de su vida y en alguna forma juntó el término con el comienzo. Su primera esposa, Aurora Bernárdez, lo acompañó en los días que precedieron a su muete, y encabezó el cortejo funerario que fue, como alguien dijo, una cita sin protocolo, como la vida del hombre que enterraban"
Dijo Eduardo Galeano:
"Julio es una larga cuerda con cara de luna. La Luna tiene ojos d estupor y melancolía. Así lo voy viendo en la penumbra del entresueño, mientras desato las pestañas (...) Esto he sentido desde que leí sus cosas por primera vez, hace más de veinte años, y yo siempre con ganas de entregarle sueños a cambio los que él me devolvía. Nunca puede"
Dijo César Fernández Moreno:
"En esa oscilación binaria construyó Cortázar su obra y gastó su vida. Europa, Francia, fueron para él generosos refugios, eficaces cajas de resonancia. Vivo o muerto, sin embargo, Julio Cortázar fue y es siempre argentino, un argentino irreductible"
Dijo Claribel Alegría:
"Con Julio Cortázar nuestra América no s´polo ha perdido a uno de los más grandes escritores de este siglo, sino también a un luchador infatigable por la liberación de nuestros pueblos. Julio, a pesar de su fama, jamás perdió su sencillez. Era un hombre que rebosaba ternura y que siempre estaba atento a la voz de los jóvenes"
Dijo Osvaldo Soriano:
"Si Arlt y Borges habían dado vida a la literatura argentina, Cortázar le agregó alegría, desenfado, desparpajo para sondear el profundo misterio del destino humano (...) No tenía hijos; lo sobreviven su madre de noventa años y una hermana en Buenos Aires. En la historia entran sus libros, los ecos de una vida digna"
Dijo José Donoso:
"Hablar con Julio cada vez era una novedad, siempre tenia intereses muy variados, múltiples, y así como era capaz de recomendar una película o un libro que lo hubiera impresionado, era capaz de llevarte a escuchar jazz a algún lugar escondido o que sólo él conocía. Cortázar garantizaba diversión"
Dijo Carlos Fuentes:
"En Cortázar se daban cita el genio literario y la modestia personal, la cultura universal y el coraje local ("las Malvinas son argentinas -solía decir-. Los desaparecidos también"). Lo había leído todo, visto todo, sólo para compartirlo todo. Una de las noches inolvidables de nuestra amistad ocurrió en el tren París-Praga en diciembre de 1968. Ibamos invitados por Kundera a mantener la ficción -es decir, la esperanza- de una cultura checa independiente en un país rodeado de tanques soviéticos. Cortázar fue hilvanando temas como un cuentista árabe de la plaza de Marrakech. Recordó todas las novelas que sucedían en trenes, enseguida las películas en trenes y por último, a partir del swing de Glenn Miller, el ritmo de locomotora del jazz y, en particular, una memoria asombrosa de la relación entre el jazz y el piano"
Dijo Juan Goytisolo:
"Cortázar era un escritor argentino de una pieza. A pesar de vivir en París y de que su cultura fuera más bien europeizante, no hubiera podido asimilar todos esos materiales -fagocitarlos, diría-, sin una disposición que es estructural en la cultura de ustedes (los argentinos) y de la cual Jorge Luis Borges creo que ha sido el exponente más alto. Quiero decir: una disposición a inventarse una tradición con todas las tradiciones, una literatura hecha de todas las literaturas"
Dijo Abelardo Castillo:
"De los grandes escritores que he conocido, ninguno, excepto Borges, parecía haber meditado tanto como él sobre el problema de la forma y el estilo. Uno tenía la impresión de que para Cortázar las palabras eran cosas, pero no en el sentido inorgánico de objetos: más bien pequeñas cosas vivas, animalitos o diminutos monstruos delicados a los que había que amaestrar cuidadosamente para hacerles cumplir la ceremonia de la sintaxis y la forma personal. Él decía haberlo aprendido de Marechal y de Borges"
Dijo Alejandra Pizarnik:
"Maravillosa es la perfección con que Cortázar plasma sus relatos: aun el más fantástico presenta una arquitectura acabada como una flor o una piedra. Se puede decir que Cortázar no deja el azar librado al azar. El humor de Cortázar se despliega por toda la gama de los colores. Siempre es humor metafísico, pero a veces negro, a veces rosa, azul, amarillo... Muchas veces es feroz; pero su ternura es inagotable; suele proyectarla tan lejos que alcanza a los animales fantásticos (Guk, camello declarado indeseable; el oso que anda por los caños de la casa), a los animales reales (tortugas) y a los "animales mecánicos" (bicicletas)"
Dijo Juan Rulfo:
"En realidad, él es nuestro hermano mayor. Nos ha enseñado con sus consejos y a través de sus libros que escribió para nosotros, lo hermoso de la vida, a pesar del sufrimiento, a pesar del agobio y la desesperanza. Él no desea esas calamidades para nadie. Menos para quienes saben que, más que sus prójimos, somos sus hermanos. Por eso queremos tanto a Julio"
Dijo José Saramago:
"Lo que más me gusta es, digamos, lo que tiene Kafka: la posibilidad de partir de un hecho sencillo y cotidiano, aparentemente sin importancia, de desarrollar un relato en el que cada palabra va retorciendo esa aparente normalidad para, poquito a poco, llegar a una situación totalmente imprevisible. Kafka no leyó a Cortázar, pero si hubiera la posibilidad de que lo leyera diríamos que son espíritus afines".
Dijo Gabriel García Márquez:
"Los ídolos infunden respeto, admiración, cariño, y por supuesto grandes envidias. Cortázar inspiraba todos esos sentimientos como muy pocos escritores, pero inspiraba además otro menos frecuente: la devoción. Fue, tal vez sin proponérselo, el argentino que se hizo querer de todo el mundo"
Dijo Volodia Teitelboim:
"Su muerte personal fue estrictamente cortazariana, casi sin ruido, en un fin que apretó todos los nudos de su vida y en alguna forma juntó el término con el comienzo. Su primera esposa, Aurora Bernárdez, lo acompañó en los días que precedieron a su muete, y encabezó el cortejo funerario que fue, como alguien dijo, una cita sin protocolo, como la vida del hombre que enterraban"
Dijo Eduardo Galeano:
"Julio es una larga cuerda con cara de luna. La Luna tiene ojos d estupor y melancolía. Así lo voy viendo en la penumbra del entresueño, mientras desato las pestañas (...) Esto he sentido desde que leí sus cosas por primera vez, hace más de veinte años, y yo siempre con ganas de entregarle sueños a cambio los que él me devolvía. Nunca puede"
Dijo César Fernández Moreno:
"En esa oscilación binaria construyó Cortázar su obra y gastó su vida. Europa, Francia, fueron para él generosos refugios, eficaces cajas de resonancia. Vivo o muerto, sin embargo, Julio Cortázar fue y es siempre argentino, un argentino irreductible"
Dijo Claribel Alegría:
"Con Julio Cortázar nuestra América no s´polo ha perdido a uno de los más grandes escritores de este siglo, sino también a un luchador infatigable por la liberación de nuestros pueblos. Julio, a pesar de su fama, jamás perdió su sencillez. Era un hombre que rebosaba ternura y que siempre estaba atento a la voz de los jóvenes"
Dijo Osvaldo Soriano:
"Si Arlt y Borges habían dado vida a la literatura argentina, Cortázar le agregó alegría, desenfado, desparpajo para sondear el profundo misterio del destino humano (...) No tenía hijos; lo sobreviven su madre de noventa años y una hermana en Buenos Aires. En la historia entran sus libros, los ecos de una vida digna"
Dijo José Donoso:
"Hablar con Julio cada vez era una novedad, siempre tenia intereses muy variados, múltiples, y así como era capaz de recomendar una película o un libro que lo hubiera impresionado, era capaz de llevarte a escuchar jazz a algún lugar escondido o que sólo él conocía. Cortázar garantizaba diversión"
Dijo Carlos Fuentes:
"En Cortázar se daban cita el genio literario y la modestia personal, la cultura universal y el coraje local ("las Malvinas son argentinas -solía decir-. Los desaparecidos también"). Lo había leído todo, visto todo, sólo para compartirlo todo. Una de las noches inolvidables de nuestra amistad ocurrió en el tren París-Praga en diciembre de 1968. Ibamos invitados por Kundera a mantener la ficción -es decir, la esperanza- de una cultura checa independiente en un país rodeado de tanques soviéticos. Cortázar fue hilvanando temas como un cuentista árabe de la plaza de Marrakech. Recordó todas las novelas que sucedían en trenes, enseguida las películas en trenes y por último, a partir del swing de Glenn Miller, el ritmo de locomotora del jazz y, en particular, una memoria asombrosa de la relación entre el jazz y el piano"
Dijo Juan Goytisolo:
"Cortázar era un escritor argentino de una pieza. A pesar de vivir en París y de que su cultura fuera más bien europeizante, no hubiera podido asimilar todos esos materiales -fagocitarlos, diría-, sin una disposición que es estructural en la cultura de ustedes (los argentinos) y de la cual Jorge Luis Borges creo que ha sido el exponente más alto. Quiero decir: una disposición a inventarse una tradición con todas las tradiciones, una literatura hecha de todas las literaturas"
Dijo Abelardo Castillo:
"De los grandes escritores que he conocido, ninguno, excepto Borges, parecía haber meditado tanto como él sobre el problema de la forma y el estilo. Uno tenía la impresión de que para Cortázar las palabras eran cosas, pero no en el sentido inorgánico de objetos: más bien pequeñas cosas vivas, animalitos o diminutos monstruos delicados a los que había que amaestrar cuidadosamente para hacerles cumplir la ceremonia de la sintaxis y la forma personal. Él decía haberlo aprendido de Marechal y de Borges"
Dijo Alejandra Pizarnik:
"Maravillosa es la perfección con que Cortázar plasma sus relatos: aun el más fantástico presenta una arquitectura acabada como una flor o una piedra. Se puede decir que Cortázar no deja el azar librado al azar. El humor de Cortázar se despliega por toda la gama de los colores. Siempre es humor metafísico, pero a veces negro, a veces rosa, azul, amarillo... Muchas veces es feroz; pero su ternura es inagotable; suele proyectarla tan lejos que alcanza a los animales fantásticos (Guk, camello declarado indeseable; el oso que anda por los caños de la casa), a los animales reales (tortugas) y a los "animales mecánicos" (bicicletas)"
Dijo Juan Rulfo:
"En realidad, él es nuestro hermano mayor. Nos ha enseñado con sus consejos y a través de sus libros que escribió para nosotros, lo hermoso de la vida, a pesar del sufrimiento, a pesar del agobio y la desesperanza. Él no desea esas calamidades para nadie. Menos para quienes saben que, más que sus prójimos, somos sus hermanos. Por eso queremos tanto a Julio"
Dijo José Saramago:
"Lo que más me gusta es, digamos, lo que tiene Kafka: la posibilidad de partir de un hecho sencillo y cotidiano, aparentemente sin importancia, de desarrollar un relato en el que cada palabra va retorciendo esa aparente normalidad para, poquito a poco, llegar a una situación totalmente imprevisible. Kafka no leyó a Cortázar, pero si hubiera la posibilidad de que lo leyera diríamos que son espíritus afines".
Borges y una polémica ajena
Por Humberto Acciarressi
A las 7.47 de la mañana del 14 de junio de 1986 se puso en marcha la maquinaria que hizo que el más universal de los escritores argentinos fuera, horas más tarde, enterrado en la tumba que lleva el número 735 en el cementerio de los reyes de Plainpalais, en Ginebra. A más de dos décadas de ese acontecimiento inevitable (su muerte), una legisladora propuso la repatriación de sus restos a Buenos Aires, ciudad que amó de la mejor manera que puede hacerlo un escritor: dedicándole poemas, cuentos y ensayos memorables. La polémica ya se instaló.
Es cierto que no hay ningún escrito conocido del autor de El Aleph en donde manifieste su deseo de ser enterrado en Suiza, y también lo es que hay pasajes suyos en los que señala el cementerio de la Recoleta como su escenario final. Pero Borges -y eso lo repitió hasta el cansancio- no creía en la posteridad y su ilusión era disolverse en la nada e incluso no dejar memoria alguna. En ese sentido, se trata de una polémica ajena a él.
Las cenizas de Roberto Arlt fueron esparcidas en el Delta; el destino del cuerpo de Rodolfo Walsh nunca fue revelado por quienes lo secuestraron y asesinaron. La mejor manera de celebrarlos es leer sus obras, no dejar que perezcan por inapetencia intelectual. Y ya que estamos, hoy se cumplen 25 años de la muerte de Julio Cortázar, cuyo cuerpo descansa en el cementerio de Montparnasse junto al de Carol Dunlop, su última esposa. ¿Hay quién crea que por eso es menos argentino?
(Publicado en "La columna del editor" de La Razón, de Buenos Aires)
A las 7.47 de la mañana del 14 de junio de 1986 se puso en marcha la maquinaria que hizo que el más universal de los escritores argentinos fuera, horas más tarde, enterrado en la tumba que lleva el número 735 en el cementerio de los reyes de Plainpalais, en Ginebra. A más de dos décadas de ese acontecimiento inevitable (su muerte), una legisladora propuso la repatriación de sus restos a Buenos Aires, ciudad que amó de la mejor manera que puede hacerlo un escritor: dedicándole poemas, cuentos y ensayos memorables. La polémica ya se instaló.
Es cierto que no hay ningún escrito conocido del autor de El Aleph en donde manifieste su deseo de ser enterrado en Suiza, y también lo es que hay pasajes suyos en los que señala el cementerio de la Recoleta como su escenario final. Pero Borges -y eso lo repitió hasta el cansancio- no creía en la posteridad y su ilusión era disolverse en la nada e incluso no dejar memoria alguna. En ese sentido, se trata de una polémica ajena a él.
Las cenizas de Roberto Arlt fueron esparcidas en el Delta; el destino del cuerpo de Rodolfo Walsh nunca fue revelado por quienes lo secuestraron y asesinaron. La mejor manera de celebrarlos es leer sus obras, no dejar que perezcan por inapetencia intelectual. Y ya que estamos, hoy se cumplen 25 años de la muerte de Julio Cortázar, cuyo cuerpo descansa en el cementerio de Montparnasse junto al de Carol Dunlop, su última esposa. ¿Hay quién crea que por eso es menos argentino?
(Publicado en "La columna del editor" de La Razón, de Buenos Aires)
Arriba: Tumba de Borges en Ginebra
Abajo: Tumba de Cortázar en Montparnasse
11 febrero 2009
Romeo dice que no tienes un e-mail
Por Humberto Acciarressi
Si Shakespeare hubiera escrito en la actualidad, Romeo y Julieta habrían terminado sus días en un asilo. La razón es sencilla. En lugar de perder tiempo a lomo de mula para llevarle a Romeo la buena noticia de que Julieta estaba simulando su muerte, el cura (recuérdese que llega tarde) le habría enviado un mail o un sms: "Tranki Ro. Juli tá viva. T kiere. No t. mat's". Y chau. Pero no: por suerte, en ese época aún se escribían cartas, así sea al precio de una tragedia en la que era casi obligación de honestidad morirse.
Ahora, en la misma Verona que fue escenario del "Romeo y Julieta" shakespereano, acaba de descubrirse un manual para escribir cartas. Contiene, en latín, consejos para esquelas varias y un capítulo para enamorados. No es el único en su género. En distintas épocas, autores diversos han "robado" a costillas de la bestialidad de un novio o una novia, o bien de su incapacidad de poner sentimientos en palabras. Pero este es de Verona, nada menos que la capital del romanticismo literario.
Hay alusiones al amor físico (tampoco la pavada: no era todo puro bla-bla), pero lo más llamativo es el estilo: "Me despido con tantos saludos como peces hay en el mar", "Mi ánimo no soporta tanta felicidad", "Por el perfume de tu amor no me negaría a escalar montes", etc. Modas son modas, las costumbres cambian y los arcaismos son un plomo. Pero aquellas cartas tenían su encanto. Aunque le hayan costado la vida a los pobres Romeo y Julieta.
(Publicado en "La columna del editor" de La Razón, de Buenos Aires)
Si Shakespeare hubiera escrito en la actualidad, Romeo y Julieta habrían terminado sus días en un asilo. La razón es sencilla. En lugar de perder tiempo a lomo de mula para llevarle a Romeo la buena noticia de que Julieta estaba simulando su muerte, el cura (recuérdese que llega tarde) le habría enviado un mail o un sms: "Tranki Ro. Juli tá viva. T kiere. No t. mat's". Y chau. Pero no: por suerte, en ese época aún se escribían cartas, así sea al precio de una tragedia en la que era casi obligación de honestidad morirse.
Ahora, en la misma Verona que fue escenario del "Romeo y Julieta" shakespereano, acaba de descubrirse un manual para escribir cartas. Contiene, en latín, consejos para esquelas varias y un capítulo para enamorados. No es el único en su género. En distintas épocas, autores diversos han "robado" a costillas de la bestialidad de un novio o una novia, o bien de su incapacidad de poner sentimientos en palabras. Pero este es de Verona, nada menos que la capital del romanticismo literario.
Hay alusiones al amor físico (tampoco la pavada: no era todo puro bla-bla), pero lo más llamativo es el estilo: "Me despido con tantos saludos como peces hay en el mar", "Mi ánimo no soporta tanta felicidad", "Por el perfume de tu amor no me negaría a escalar montes", etc. Modas son modas, las costumbres cambian y los arcaismos son un plomo. Pero aquellas cartas tenían su encanto. Aunque le hayan costado la vida a los pobres Romeo y Julieta.
(Publicado en "La columna del editor" de La Razón, de Buenos Aires)
10 febrero 2009
Carlos Fuentes escribió sobre Cortázar
Un par de entradas atrás, comenzamos con los homenajes de esta revista digital a Julio Cortázar, a 25 años de su muerte. Allí mencionábamos las películas inspiradas en obras suyas. Acá subimos fragmentos de una nota escrita por Carlos Fuentes para ser leida en la inauguración de la Cátedra Latinoamericana Julio Cortázar, publicada por el diario La Nación.
Escribió Carlos Fuentes:
" (...) sin conocernos aún, me mandó la carta más estimulante que recibí al publicar, en 1958, mi primera novela, La región más transparente. Mi carrera literaria le debe a Julio ese impulso inicial, en el que la inteligencia y la exigencia, el rigor y la simpatía, se volvían inseparables y configuraban, ya, al ser humano que me escribía de usted y con el que yo ansiaba cortar el turrón (...)"
" (...) Lo sabía todo. Era el latinoamericano en Europa que sabía algo más que los europeos. Y ese algo más -el nuevo mundo americano- era lo que los propios europeos inventaron pero no supieron imaginar: el hombre tiene dos sueños, hay más de un paraíso. Cortázar llegó tarde a México. Me dijo después de su viaje, en 1975, que Oaxaca, Monte Albán, Palenque, eran lugares metafísicos donde convenía pasarse horas de quietud, en silencio, aprovechando eso que Henry James llamaba "una visitación".
" (...) Lo recuerdo en nuestras caminatas por el Barrio Latino a caza de la película que no habíamos visto, es decir, la película nueva o la película antigua y vista diez veces que Cortázar iba a ver siempre por primera vez. Adoraba lo que enseñaba a mirar, lo que le auxiliara a llenar los pozos claros de esa mirada de gato sagrado, desesperado por ver, simplemente porque su mirada era muy grande. Antonioni o Buñuel, Cuevas o Alechinsky, Matta o Silva: Cortázar como ciego a veces, apoyado en sus amigos videntes, sus lazarillos artísticos.
Lo recuerdo: la mirada inocente en espera del regalo visual incomparable. Lo llamé un día el Bolívar de la novela latinoamericana. Nos liberó liberándose, con un lenguaje nuevo, airoso, capaz de todas las aventuras: Rayuela es uno de los grandes manifiestos de la modernidad latinoamericana, en ella vemos todas nuestras grandezas y todas nuestras miserias, nuestras deudas y nuestras oportunidades, a través de una construcción verbal libre, inacabada, que no cesa de convocar a los lectores que necesita para seguir viviendo y no terminar jamás (...)"
Cuidado con la kriptonita
"Los fragmentos radioactivos del planeta, compuestos por el mineral llamado kryptonita, fueron lanzados por la explosión al espacio. Generalmente, aparecen bajo la forma de cristales verdes, aunque también hay variedades roja, negra, etc., de distintas propiedades. La Kryptonita es letal en los kriptonianos, en los humanos es casi inofensiva, pero no del todo, ya que si se exponen por mucho tiempo (años) puede generar envenenamiento de la sangre"
("Científica" definición de la Wikipedia sobre el material que tanto daño le hace a Superman)
Arriba: tapa de la revista Action, en la que Superman apareció por primera vez, en junio de 1938.
09 febrero 2009
Julio Cortázar en el cine
Por Humberto Acciarressi
A continuación, como inicio de una serie de entradas para recordar los 25 años de la muerte de Julio Cortázar, ennumeramos algunas de las películas que se realizaron inspiradas en obras suyas. Faltan algunas (toda nómina siempre es imperfecta) y no está ninguno de los documentales, que subiremos en un post posterior. Huelga aclarar que si los amigos de este blog no han visto alguna de ellas, estaría bastante bien que lo hicieran. La calidad de las mismas no es pareja, pero ¿hay algo perfecto en este mundo?
Y ya que estamos, recordemos una frase de Cortázar en la que emparenta el cine con otras actividades que hacen la vida más vivible:
"Mi conducta de lector, tanto en mi juventud como en la actualidad, es profundamente humilde. Es decir, te va a parecer quizá ingenuo y tonto, pero cuando yo abro un libro lo abro como puedo abrir un paquete de chocolate, o entrar en el cine, o llegar por primera vez a la cama de una mujer que deseo; es decir, es una sensación de esperanza, de felicidad anticipada, de que todo va a ser bello, de que todo va a ser hermoso"
La cifra impar (1962)
Basada en el cuento "Cartas a mamá" ("Las armas secretas")
Dirección: Manuel Antín
El perseguidor (1962)
Basada en el relato "El perseguidor" (Las armas secretas)
Dirección: Osías Wilensky
Circe (1963)
Basada en el cuento "Circe" (Bestiario)
Dirección: Manuel Antín
Intimidad de los parques (1964)
Basada en los cuentos "Continuidad de los parques" y "El ídolo de las Cícladas" (Final de juego)
Dirección: Manuel Antín
Blow up (1966)
Basada en el cuento "Las babas del diablo" (Las armas secretas)
Dirección: Michelangelo Antonioni
Week End (1967)
Basada en el cuento "La autopista del sur" (Todos los fuegos el fuego)
Dirección: Jean-Luc Godard
La fin du jeu (1971)
Basada en el cuento "Final de juego" (Final del juego)
Dirección: Walter Renaud
El río (1972)
Basada en el cuento "El río" (Final del juego)
Dirección: Arturo Balassa
Continuidad de los parques (1972)
Basada en el cuento "Continuidad de los parques" (Final del juego)
Dirección: Fabián Bielinsky
Monsieur Bébé (1974)
Basada en el cuento "Los buenos servicios" (Las armas secretas)
Dirección: Claude Chabrol
L'Ingorgo (Una storia impossibile) (1978)
Basada en el cuento "La autopista del sur" (Todos los fuegos el fuego)
Dirección: Luigi Comencini
Cartas de mamá (1978)
Basada en el cuento "Cartas de mamá" (Las armas secretas)
Dirección: Miguel Picazo
Instrucciones para John Howell (1982)
Basada en el cuento "Instrucciones para John Howell (Todos los fuegos el fuego)
Dirección: José Antonio Páramo
Sinfin (1986)
Basada en en el cuento "Casa tomada" (Bestiario)
Dirección: Cristian Pauls
End of the game (1988)
Basada en el cuento "Final de juego" (Final de juego)
Dirección: Michelle Bjornson
La nuit face au ciel (1992)
Basada en el cuento "La noche boca arriba" (Final del juego)
Dirección: Harriet Marin
Avtobus (1994)
Basada en el cuento "Omnibus" (Bestiario)
Dirección: Vytautas Palsis
House Taken Over (1997)
Basada en el cuento "Casa tomada"(Bestiario)
Dirección: Liz Hughes
Diario para un cuento (1998)
Basada en el cuento "Diario para un cuento" (Deshoras)
Dirección: Jana Bokova
Furia (1999)
Basada en el cuento "Graffiti" (Queremos tanto a Glenda)
Dirección: Alexandre Aja
Fear of Alternative Realities (1999)
Basada en el cuento "La noche boca arriba" (Final del juego)
Dirección: Zhanna Kleiman
Instrucciones para subir una escalera (1983)
Basada en "Instrucciones para subir una escalera" (Historias de cronopios y de famas)
Dirección: Roberto Cerendelli
Juego Subterráneo (2005)
Basada en el cuento "Manuscrito hallado en un bolsillo" (Octaedro)
Dirección: Roberto Gervitz
Sueños (2006)
Basada en "La noche boca arriba" (Final del juego) de Julio Cortázar y en el segundo volumen de la saga "La torre oscura" de Stephen King
Dirección: Juan Manuel Salinas
Mentiras piadosas (2009)
Basada en el cuento "La salud de los enfermos" (Todos los fuegos el fuego)
Dirección: Diego Sabanés
06 febrero 2009
Los amigos de Bill, el socorrista
Por Humberto Acciarressi
No llegó, como suele suceder con estas historias, en el más insoportable de los inventos modernos: el spam. Aunque bien podría venir montado en uno de ellos, al estilo de "páselo de mano y gane cien mil euros o no lo reenvíe y muera mañana". No. Esta historia llega de las mejores fuentes y el sujeto existe, refugiado en una cabina en el corazón del Times Square de Manhattan. Se lo conoce como Bill, el socorrista. Lo más parecido al título de una serie de la década del 60. O a una película insoportable interpretada por Tom Hanks.
¿Y qué hace este misterioso personaje que se esconde detrás de unos anteojos negros y un gorro de lana? Entrega cifras que van desde los 50 dólares hasta los 5.000, a cambio de hacer una fila con frío, nieve sobre el cuerpo y café en mano, y una vez frente a Bill contarle tu historia. En estos días, los norteamericanos se matan pensando qué quiere el socorrista, y les parece sospechoso que tenga empleados publicitando su sitio web. Pero a la gente no le importa. Ellos revelan sus secretos íntimos, y cobran cash por los servicios prestados.
La idea del socorrista es maravillosa, porque se basa en las dos necesidades del momento: el dinero y el ansia de contar historias sobre uno. Debe ser uno de los artificios más impactantes junto con el demasiado psiquiátrico amigo invisible. La vida no da finales muy felices, pero sería lindo que nadie conociera su identidad. Entonces sí sería como haber tenido una cita a ciegas con Papa Noel.
(Publicado en "La columna del editor" de La Razón, de Buenos Aires)
No llegó, como suele suceder con estas historias, en el más insoportable de los inventos modernos: el spam. Aunque bien podría venir montado en uno de ellos, al estilo de "páselo de mano y gane cien mil euros o no lo reenvíe y muera mañana". No. Esta historia llega de las mejores fuentes y el sujeto existe, refugiado en una cabina en el corazón del Times Square de Manhattan. Se lo conoce como Bill, el socorrista. Lo más parecido al título de una serie de la década del 60. O a una película insoportable interpretada por Tom Hanks.
¿Y qué hace este misterioso personaje que se esconde detrás de unos anteojos negros y un gorro de lana? Entrega cifras que van desde los 50 dólares hasta los 5.000, a cambio de hacer una fila con frío, nieve sobre el cuerpo y café en mano, y una vez frente a Bill contarle tu historia. En estos días, los norteamericanos se matan pensando qué quiere el socorrista, y les parece sospechoso que tenga empleados publicitando su sitio web. Pero a la gente no le importa. Ellos revelan sus secretos íntimos, y cobran cash por los servicios prestados.
La idea del socorrista es maravillosa, porque se basa en las dos necesidades del momento: el dinero y el ansia de contar historias sobre uno. Debe ser uno de los artificios más impactantes junto con el demasiado psiquiátrico amigo invisible. La vida no da finales muy felices, pero sería lindo que nadie conociera su identidad. Entonces sí sería como haber tenido una cita a ciegas con Papa Noel.
(Publicado en "La columna del editor" de La Razón, de Buenos Aires)
Hay que terminar con poesía
"Y cuando llegue el día del último viaje,
y esté al partir la nave que nunca ha de tornar,
me encontraréis a bordo, ligero de equipaje,
casi desnudo, como los hijos de la mar"
Antonio Machado
05 febrero 2009
Michelle, están tocando nuestra canción
Por Humberto Acciarressi
Algo falló en la campaña de Obama. Se logró el objetivo, pero algo no funcionó bien. La razón es sencilla: sus creativos no hicieron lo único que hubiera bastado para marcar la diferencia entre el hoy presidente de EE.UU. y John McCain. Si decían que el republicano tenía dos canciones de ABBA entre las cinco de cabecera, hubieran espantado hasta a los integrantes de la Asociación Nacional del Rifle.
Claro que a esto habría que añadirle que Obama, en los cinco primeros puestos de su top ten, nombra a los Stones con "Gimme Shelter" (si hubiera elegido "Brown sugar" ya estaría en los listados de la DEA), a la insuperable Nina Simone con "Sinnerman" y a Bruce Springsteen con "I´m On Fire". Y agreguemos las otras dos: "What´s Going On" por Marvin Gaye (tema que nombra el mejor album de este músico drogón y pendenciero, que fue muerto a balazos por su padre) y a "The Fugees" con "Ready Or Not", donde el trío de raperos dice "...me refugio en la Bahía de Guantánamo /bailando por la frontera como si fuera Cassius Clay".
Y además "City Of Blinding Lights" de U2, "Think" de Aretha Franklin, "Touch The Sky" de Kanye West, "You´d Be So Easy" de Sinatra e "Yes We Can" de Wil .i.am (aunque ésta, su canción de campaña, es demasiado obvia en el listado). Tipo raro este Obama: no sabemos todavía cómo será su presidencia, pero es el más original que se ha sentado en el salón Oval. Y por si las moscas, ya tiene asegurado su futuro como DJ.
(Publicado en "La columna del editor" de La Razón, de Buenos Aires)
Algo falló en la campaña de Obama. Se logró el objetivo, pero algo no funcionó bien. La razón es sencilla: sus creativos no hicieron lo único que hubiera bastado para marcar la diferencia entre el hoy presidente de EE.UU. y John McCain. Si decían que el republicano tenía dos canciones de ABBA entre las cinco de cabecera, hubieran espantado hasta a los integrantes de la Asociación Nacional del Rifle.
Claro que a esto habría que añadirle que Obama, en los cinco primeros puestos de su top ten, nombra a los Stones con "Gimme Shelter" (si hubiera elegido "Brown sugar" ya estaría en los listados de la DEA), a la insuperable Nina Simone con "Sinnerman" y a Bruce Springsteen con "I´m On Fire". Y agreguemos las otras dos: "What´s Going On" por Marvin Gaye (tema que nombra el mejor album de este músico drogón y pendenciero, que fue muerto a balazos por su padre) y a "The Fugees" con "Ready Or Not", donde el trío de raperos dice "...me refugio en la Bahía de Guantánamo /bailando por la frontera como si fuera Cassius Clay".
Y además "City Of Blinding Lights" de U2, "Think" de Aretha Franklin, "Touch The Sky" de Kanye West, "You´d Be So Easy" de Sinatra e "Yes We Can" de Wil .i.am (aunque ésta, su canción de campaña, es demasiado obvia en el listado). Tipo raro este Obama: no sabemos todavía cómo será su presidencia, pero es el más original que se ha sentado en el salón Oval. Y por si las moscas, ya tiene asegurado su futuro como DJ.
(Publicado en "La columna del editor" de La Razón, de Buenos Aires)