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08 septiembre 2011

El jardinero se salvó de milagro

El estadounidense Leroy Luetscher podaba tranquilamente las plantas del patio de su casa en el estado de Arizona. Todo hasta que su tijera cayó al suelo y se clavó en la tierra. Cuando fue a recogerla, el hombre perdió el equilibrio, cayó sobre la herramienta, se clavó una de los mangos en el ojo derecho y el otro quedó apoyado sobre su carótida. Te la abrevio. En el hospital no podían creer lo que veían, señalaron los médicos, que después de un trabajo artesanal le salvaron la vida y la vista (la radiografía corresponde al hecho que narramos). Ahora sólo le quedó un poco de visión doble en el ojo afectado. En verdad, el jardinero hogareño la sacó muy barata.