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30 julio 2007

El cine de luto: murió Ingmar Bergman


Esta mañana, con la muerte de Ingmar Bergman en su casa de la Isla de Faro del Mar Báltico, desaparece uno de los últimos grandes del cine del siglo XX. Murió a los 89 años, en el sitio donde se había refugiado en las tres últimas décadas. Privilegio de los genios: es difícil, si no imposible, mencionar algunas de sus películas sin ser injustos con las otras. Aún corriendo ese riesgo, vienen a la memoria obras como "Juventud divino tesoro", "La fuente de la doncella", "El séptimo sello", "Escenas de la vida conyugal", "Gritos y susurros", "Noche de circo", "Cuando huye el día", "Detrás de un vidrio oscuro", "El silencio", "Fanny y Alexander", "Persona", "Cara a cara","El huevo de la serpiente", "Sonata de otoño", "En presencia de un payaso"... Imposible, no puede dejarse fuera ninguna de sus películas y nombrarlas todas llevaría un párrafo enorme. Sólo resta decir que había nacido el 14 de julio de 1918 en Uppsala. Y prometer, para las próximas horas, una columna que salga del corsé del dato de último momento.