Exitosamente culminó el vuelo inaugural del primer avión comercial de Europa que permite experimentar la sensación de "gravedad cero". El precio que pagaron las personas a bordo por sentirse como astronautas durante unos instantes fue de 7.850 dólares. Los pasajeros del Airbus A300 Zéro-G, que despegó del aeropuerto de Burdeos (Francia), tuvieron la sensación de flotar gracias a maniobras que elevaron el avión hasta 8.500 pies, y luego lo hicieron descender de manera controlada para conseguir dentro de la nave un estado similar a la caída libre en el vacío.