Por Humberto Acciarressi
El mundo de las historietas, los títeres y los cartoons está en pie de guerra. Como en las andanzas cinematográficas de Roger Rabbit, todos saben que se encuentran en peligro. Las acusaciones que pesan sobre algunos son tremendas. Sin embargo, ninguna como la solicitada por el pastor evangélico norteamericano Kevin Swanson: nada menos que la pena de muerte para la Rana René.
El religioso, en diarias arengas en su programa de radio, sostiene que la integrante de los Muppets se encuentra irremediablemente "en la senda de la sodomía" con su amiga, la cerdita Piggy, razón por la cual ambos deben ser juzgados y condenados a muerte ¿Te quedó claro? Un pastor propone, seriamente, ante una audiencia que lo escucha también seriamente, que se le aplique la pena de muerte a un muñeco. Y como está sediento de "sangre" hace extensivo el pedido a todo el clan de los Muppets, ya que expresa que no se puede tolerar -sin intervenir- que además de la sodomía, apoyen el matrimonio gay.
Hace poco, la compañía del fallecido Jim Henson, el creador de los Muppets, rompió el contrato con la cadena norteamericana de comida Chick-fil-A, dado que el dueño hizo declaraciones contra el matrimonio entre personas del mismo sexo. Alli fue cuando intervino el pastor, aunque no fue el único. Un compañero de emisora de Swanson, un tal Dave Buehner, agregó que: "René no está tan interesado en la cerdita Piggy, quizá esté interesado en otra rana". O sea: estamos ante un demente que hace escuela.
No huelga recordar que hace poco, otro integrante del clan Muppet, Elmo de Plaza Sésamo, fue acusado vilmente. Se dijo que su música era utilizada para quebrar a los prisioneros en la cárcel estadounidense de la Base de Guantánamo. Argumentan que les hacían escuchar uno y hasta dos días seguidos canciones de Plaza Sésamo, con Elmo de protagonista. Insisto: ¿te das cuenta de que estamos hablando de muñecos, no? Parece que ellos no.
(Publicado en la columna "El click del editor", de La Razón, de Buenos Aires)