En la ciudad de Harbin, en el extremo norte de China, se inauguró el 28° Festival de la Nieve y el Hielo. Se trata de un evento tradicional que dura varios meses y cuyas estrellas son gigantescas estatuas hechas de nieve y agua helada. La iluminación nocturna, además, le da al espacio una poesía muy particular. Para la construcción de este "mundo helado" se utilizaron 180.000 metros cúbicos de hielo y se necesitaron 600.000 metros cúbicos de nieve artificial para cubrirlo. En la preparación del festival trabajaron 1.500 personas durante 17 días. No fue en vano.