De acuerdo a la información brindada por la Asociación del Fubol Argentino, publicaron todos los diarios argentinos, de latinoamérica y de España e Italia, esto que se difundió en el diario Clarín:
"Los números oficiales de la AFA le dieron la razón a los hinchas de River que cantan "no alcanzan las tribunas, no alcanzan las entradas...♪♪♪". Pese a estar en Primera B Nacional y a que sólo se vendieron entradas en 12 de los 18 partidos que jugó el equipo (ante Desamparados y Defensa y Justicia fue sin público y frente a Gimnasia La Plata, Atlanta, Aldosivi y Atlético Tucumán lo hizo sin expendio de entradas para la gente local), los hinchas de River fueron los que más entradas compraron en el semestre en todo el fútbol argentino.
River vendió 185.977 entradas con un promedio de 10.332 por encuentro mientras Boca, que salió campeón del Torneo Apertura 2011 y terminó segundo en la tabla de localidades, vendió 128.526 entradas en 19 partidos (River, encima, jugó 18 partidos), lo que da un promedio de 6.765 . En el ranking difundido anoche se computan las populares y plateas vendidas por cada club como local y visitante. En realidad, no se trata de un fenómeno nuevo: desde hace más de diez años River viene siendo con holgura el equipo que más entradas vende en Argentina"
Y sigo yo:
Hablando de gente, River contra Patronato en el Monumental metió casi 62.000 hinchas, mientras Boca, de local ante Banfield al conseguir el título, no llegó ni a la mitad. Obviamente, si tienen una cancha de mierda el problema no es de River. Hace rato que el verso de Alberto J.Armando sobre "la mitad más uno" referido a la hinchada de Boca no lo cree nadie. Una prueba contundente, a las muchas que se conocen de sobra, es que en el último partido, ese inodoro conocido como Bombonera (tres veces más chico que el Monumental) tenía más vacíos que un asado de campo. Y lo de River, a la inversa, es un fenómeno a nivel mundial. Lo demás es puro bla bla de los bosteros, que necesitaron que no estuviera River para obtener un título después de varios años y, aún así, estar nueve campeonatos por debajo del Millo.