Hace unos días, por cuestiones de cambios de turno en el diario, no nos vemos. Pero siempre ando por sus blogs, disfrutando de sus fotografías, de la edición de éstas y los textos precisos. Como en el capítulo de "El lobo estepario": sólo para locos. Es un honor trabajar con Ceci Profético. Y basta de palabras. Crucen el espejo como Alicia y disfruten
acá de sus maravillas.