06 junio 2014

La historieta italiana en el Museo del Humor


Por Humberto Acciarressi

Así como Estados Unidos y la Argentina en América, Francia e Italia han sido y son, obligados puntos de referencia al momento de hablar de historietas. En Buenos Aires, ya sea por amor al género como por tradición de las corrientes inmigratorias, las tiras italianas, los fumettos, han estado emparentados de una u otra forma con nuestra idiosincracia. Alla en la península, a una primera época (marcada con la aparición del "Corriere dei Piccoli", suplemento infantil del "Corriere della Sera"), pasando por la etapa fascista (con la llegada masiva de cómics norteamericanos, a pesar de que Mussolini prohibió las historietas que no fueran italianas), se llega al surgimiento de dos tiras que iban a ser replicadas en España y en nuestro país: "Misterix" y "Dick Fúlmine".

Ya en la posguerra, y en apretada síntesis, la historieta ganó en popularidad incluso entre los intelectuales y artistas de otras disciplinas (ya nos hemos referido, en una columna anterior, a la influyente fascinación que Federico Fellini sentía por los comics). Y unos años más tarde comenzaron a arribar los argentinos o los historietistas formados y afincados en el país (entre ellos Héctor Oesterheld, Alberto Muñoz, Arturo Pérez del Castillo, Alberto Breccia, etc), y así se fundaron en la península revistas como "Asso di Picche Comics", "Sargento Kirk" o se popularizaron otras como "Skorpio", nacida en la Argentina y luego afianzada en Italia. La relación entre guionistas y dibujantes de ambos países se fue haciendo cada vez más sólida, especialmente desde el fin de la Segunda Guerra Mundial.

Ahora, como una forma de ahondar en el género y para verificar la estrecha relación de dos países exportadores de historietas, en el Museo del Humor (Av.De Los Italianos 851), con entrada libre y gratuita entre el 4 y el 30 de junio, se podrá visitar la muestra "Comics Che Passione! -Maestros del comic italiano desde los años 30 hasta nuestros días-". La exposición, entre otras cosas de gran importancia cultural, documenta los más famosos personajes y autores, desde Ruby hasta Milo Manara, pasando naturalmente por clásicos de Walt Disney aggiornados y exportados desde la península, como por ejemplo "Topolino (el ratón Mickey) y Paperino and Co". De hecho, la Disney italiana llegó a superar por momentos a la estadounidense en materia de producción y tiraje. Esta nueva muestra en la ex- Munich, ahora dependiente del ministerio de Cultura porteño, dará para repasar y conocer muchos artistas italianos que han convertido esta actividad considerada orillera en décadas pasadas, en un arte con mayúsculas.

(Esta columna fue publicada en el diario La Razón y también podés leerla acá)