18 abril 2009

Ashton Kutcher y el mito de los "amigos"


¿Qué es eso del millón de amigos?

Por Humberto Acciarressi

Obviamente no nos referimos a la canción de Roberto Carlos, que en definitva tenía -es la aspiración de un poema, aunque sea cantado- un horizonte metafórico. Hacemos alusión al caballito de batalla de las redes sociales, ese que convierte la amistad en un intercambio virtual de avatares. "Juan Perez quiere ser tu amigo en (aquí ponés la red que te parezca)". ¿Pero de qué se trata esto?, ¿cómo gente que no puede sostener una relación con una única persona tiene la aspiración de tener un millón de amigos?, ¿hay un nuevo tipo de droga que los internautas fuman y de la que yo no me enterado?

Ahora, lo más nuevo en esta materia, fue el desafío que el actor estadounidense Ashton Kutcher le ganó al ás de Poker de la CNN, Larry King, en ver quien franqueaba primero la barrera del millón de "followers" en Twitter. En la madrugada de ayer, el marido de Demi Moore escribió: "La victoria es nuestra", reivindicando una victoria del "pueblo" contra el "sistema". Kutcher, cuyo nombre en Twitter es @aplusk, tenía unos 2.000 seguidores más que CNN (@cnnbrk), cuando alcanzó la marca del millón tan esperada.

Por su lado, la cadena de noticias reconoció la derrota con un lacónico comunicado:"Ashton Kutcher es el primero en alcanzar un millón de seguidores en el concurso de Twitter frente a CNN". La noche anterior, en el borde exacto entre la fanfarronería y el mal gusto, Larry King había dicho en su programa: "Hey, Kutcher ¿estás bromeando?, ¿crees que puedes ganar a toda una cadena?, ¿sabes lo grande que somos?, ¿sabes lo que es CNN? Kutcher, estás jugando en la liga equivocada. CNN va a aplastarte". Pues no lo aplastó. Ganó el actor.

El resultado del pleito twitteril, que es un golpe de gran publicidad para la cadena, el actor y naturalmente el microbloggin, es apenas un dato más. Lo que es realmente alarmante ahora, es que hecho realidad el vaticinio de Andy Warhol sobre "los quince minutos de fama", tanta gente a la vez esté empeñada en una carrera no tan ambiciosa en cantidad de "amigos", pero igualmente perniciosa en lo que a la amistad se refiere. ¿No alcanzan a darse cuenta que entre millones uno, inevitablemente, pasa inadvertido? Y allí no hay foto, avatar, frase ingeniosa, link a otras redes sociales, música que difundan los aspirantes a DJ´s, que valga. Pero esto no termina acá. Seguiremos hablando de las amistades reales y de las virtuales.